Algo común en nuestra profesión de embellecer a la mujer que se casa o a la invitada es, una vez que se ha elegido el peinado que se llevará el día de la boda, si es importante que lleve algún complemento por deseo de la novia o como símbolo al servicio de una imagen personal para la invitada o vida futura de felicidad para la novia.
El tocado es una costumbre que viene desde muy antiguo, desde los griegos hasta los romanos que llegaban hasta el altar debajo de una corona floral ornamental llamada corona nuptialis. Hoy en día han evolucionado los ornamentos hasta tal punto, que se han convertido en todo un elemento casi indispensable para novias e invitadas. El más famoso tocado que se suele complementar con otros elementos decorativos aquí en Córdoba es el tradicional velo de novia. Es un arte la colocación y simbología que emite el velo de novia a las personas que lo contemplan y complementa perfectamente el peinado que la novia haya elegido, siendo los recogidos y semirecogidos los de mayor demanda.
El tocado y complemento es una forma de expresión en la mujer para realzar el peinado estableciendo un diálogo de equilibrio. Un tocado barroco, recargado puede complementarse con recogidos sobrios, de pelo poco ondulados buscando contraste entre el color y matiz del pelo con el color y gama del tocado.
Los tocados sobrios, amplios, de base circular encajan muy bien para bodas de días soleados y claros para proteger la tez de la invitada y crear misterio e interés en las personas que miran. La creación de estilo es personal y único y es frecuente que el tocado sea buscado para dar un toque exclusivo que identifique la personalidad de la persona que lo porta. Es frecuente que el tocado sea diseñado como símbolo de identidad de pertenencia a su propietario o diseñador.
Los tocados para bodas se han definido y variado el concepto a lo largo del tiempo. Tenemos estilos variopintos dentro de la gama que se puede encontrar en las tiendas especializadas como coronas de flores, diademas, tiaras, plumas horquillas, perlas, peinetas, velos nupciales y casi cualquier complemento que posibilite un realce del peinado y el vestido de novia.
En las novias, el tradicional tocado ha venido siendo el blanco, aunque ya los colores cromáticos se han ampliado porque la novia actual es más vanguardista y menos tradicional, ampliándose el espectro cromático, siendo marfiles, blancos rotos, vainillas, topos claros etc.. ,los de mayor demanda.
Si necesitáis ideas sobre tocados para bodas porque vais a asistir como invitadas y la ocasión lo exige, os dejamos una pincelada para que vayáis abriendo boca, pero recordad que el tocado no es el fin sino un complemento que debe realzar el conjunto de belleza formada por el visaje del rostro, el estilo elegido para el peinado y color de pelo, el estilo elegido del vestido de novia o de la invitada, la tez de la piel y maquillaje para dar tonalidad a la misma que reflejara una determinada imagen en su conjunto.